De modo muy rústico se podría dividir a la humanidad entre aquellos que desde pequeños (por motivación o puro azar) sintieron con intensidad su vocación y aquellos que fuimos descubriendo a lo largo del camino, que será eso que haremos.
Como nada es blanco o negro, también está la historia de la cantante americana Melody Gardot, quien a los 19 años tuvo un accidente de coche y gracias a la terapia musical sugerida para su recuperación, descubrió la pasión por la música, su talento para el jazz.
Así comenzó su carrera, publicando un primer disco bajo el nombre de Some Lessons – The Bedroom Sessions (2005), claro testimonio de alguien que supo caer y más aún, levantarse y seguir, dejando a un costado ciertas secuelas del accidente, para concentrarse en crear algo mejor de todo eso.
El público, la prensa y todo aquel con oído y sensibilidad, pusieron atención a Melody y empezó el éxito y siguieron los conciertos, los aplausos y más discos como “Worrisome Heart” (2008), “Live from SoHo” (2009) y “My One and Only Thrill” (2009).
Actualmente Melody Gardot, con sólo 23 años, muestra al mundo su música, su belleza y agrega un rango válido para cualquier división de la humanidad: “Tengo vida, tengo mi vida” (fragmento de “Ain't got No/I got Life”, de Nina Simone).
Si te interesó puedes visitar http://www.myspace.com/melody.
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